Hace ya bastantes años que no voy a un campamento de verano, pero por lo que puedo recordar era bastante divertido, pero eso era más que nada porque te pasabas el día jugando con otros niños mientras que en casa tenías que jugar tú solo casi siempre.
Cuando leías la lista de las cosas que tenías que llevar al campamento, te dabas cuenta de que casi siempre te pedían lo mismo pero lo que más me llamaba la atención es que casi todos los niños llevaban la misma clase de calzado, que eran como unas alpargatas que eran como las zapatillas eco de hoy en día. Esa clase de alpargatas todavía se pueden ver por la calle aunque ahora las llevan gente bastante más mayor. A mi esta clase de calzado nunca me ha resultado demasiado cómodo, ya que tienes los movimientos limitados porque esta clase de calzado no se puede usar para hacer bastantes actividades.
Lo que recuerdo con más cariño de los campamentos era cuando nos llevaban a alguno de los ríos que teníamos cerca de donde era la zona de acampada, allí era donde mejor nos lo pasábamos todos.
Con los años pasé de ir a los campamentos de veranos a irme de camping con los amigos, que era infinitamente mejor y más divertido porque estabas con tus amigo y no con unos niños a los que apenas conocías. Cuando te vas de camping con los amigos solamente tienes que preocuparte de qué es lo que vas a comer y en muchas ocasiones ni eso es importante. A mi grupo de amigos nos gustaba ir a una isla que no nos queda demasiado alejada de nuestras casas, además allí el camping era gratis hasta hace muy pocos años, pero las cosas en esa isla han cambiado por completo y hemos dejado de ir de camping, ahora usamos nuestro tiempo en verano en otra clase de actividades como ir en el barco de uno de mis amigos. Y he de decir que no nos arrepentimos de haber abandonado ir de camping por pasar el verano en el barco sin que nadie te moleste.